El próximo jefe de Energía de la Unión Europea, Dan Jorgensen, quiere acelerar el fin de la dependencia del bloque de los combustibles fósiles rusos, tal y como ha revelado él propio dirigente en una audiencia parlamentaria.
«Tenemos un desafío, nuestra industria está sufriendo. Están pagando dos o tres veces más por la energía que en Estados Unidos y China… La gente común está luchando para pagar sus facturas. En mis primeros 100 días, presentaré un plan sobre cómo acelerar el fin de nuestra dependencia del gas ruso antes de 2027″, añadió, considerando que se debe “en gran medida a la guerra de Ucrania”.
Además, Jorgensen añadió que «solíamos obtener el 45% de nuestro gas de Rusia, ahora hemos bajado al 18%, pero el 18% sigue siendo demasiado, necesitamos ser 100% independientes del combustible ruso». La UE prohibió las importaciones de petróleo ruso con algunas excepciones en 2022, pero no llegó a imponer restricciones al gas. En junio, los países dieron un primer paso y prohibieron los transbordos de gas natural licuado (GNL) ruso a través de los puertos europeos.
En este contexto, la presidenta de la Comisión, Ursula von der Leyen, ha encargado a Jorgensen que reduzca los precios de la energía para tratar de restaurar la competitividad industrial de Europa, descarbonizar la economía y poner fin a las importaciones energéticas rusas restantes del bloque.
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