El sector de la energía nuclear vuelve a estar en el punto de mira. Desde este lunes, 1 de julio, la Tasa Enresa sube al 30 %, tal y como aprobó el Consejo de Ministros, una decisión catalogada por las energéticas del sector en Foro Nuclear como “desproporcionada, discriminatoria y asfixiante, que amenaza seriamente la continuidad de la operación del parque nuclear español».
El rechazo es mayor porque en 2019 se acordó que entre 2027 y 2035 se iba a incrementar solo un 20% respecto al límite vigente de 7,98 €/MWh. El resultado ha sobrepasado las estimaciones del sector, que ve como la tasa sube un 30%, hasta los 10,36€/MWh. En total, las energéticas pagan unos 580 millones de euros al año por la tasa Enresa por los 450 millones actuales.
En otros países son las empresas de las distintas centrales nucleares las que se hacen cargo de los costes de desmantelamiento y la gestión de residuos, pero en España esa tarea corresponde a la empresa pública Enresa y las centrales nucleares le pagan por el servicio.
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