La Normalización tiene como objetivo la elaboración de una serie de especificaciones técnicas, normas, que son utilizadas por las organizaciones, de manera voluntaria, como garantía para probar la calidad y la seguridad de sus actividades y productos.
Una norma es un documento de aplicación voluntaria que contiene especificaciones técnicas basadas en los resultados de la experiencia y del desarrollo tecnológico que se elabora por consenso entre todas las partes interesadas e involucradas en la actividad objeto de la misma y que debe ser aprobada por un organismo de normalización reconocido, organismo que en España es la Asociación Española de Normalización (UNE), que al igual que en todos los países europeos, es una asociación privada sin ánimo de lucro.
No obstante, una norma se convierte en un documento de aplicación obligatoria cuando el organismo regulador o el cliente demandan que se utilice o la legislación establece su uso. En la nota se presenta una descripción del proceso de normalización español en que se detalla el mecanismo de elaboración de normas y las relaciones internacionales junto con el procedimiento de desarrollo de normas por organismos internacionales.
LA NORMALIZACIÓN EN ESPAÑA Y SUS RELACIONES INTERNACIONALES
La Normalización está regulada por el Real Decreto 2200/1995, de 28 de diciembre, por el que se aprueba el Reglamento de la Infraestructura para la Calidad y Seguridad Industrial, que reconoce a la Asociación Española de Normalización y Certificación, AENOR, como Organismo de Normalización. En el Real Decreto 1072/2015, de 28 de diciembre, por el que se aprueba el Reglamento de la Infraestructura para la Calidad y Seguridad Industrial, se impone la separación de las actividades de Normalización y Certificación, por lo que el organismo encargado de la normalización cambia el nombre a Asociación Española de Normalización.
Una norma es un documento de aplicación voluntaria que contiene especificaciones técnicas basadas en los resultados de la experiencia y del desarrollo tecnológico que se elabora por consenso entre todas las partes interesadas e involucradas en la actividad objeto de la misma y que
debe ser aprobada por un Organismo de Normalización reconocido, Organismo que en España es la Asociación Española de Normalización (UNE), que al igual que en todos los países europeos, es una asociación privada sin ánimo de lucro.
No obstante, una norma se convierte en un documento de aplicación obligatoria cuando el organismo regulador o el cliente demandan que se utilice o la legislación establece su uso.
Las normas constituyen una base para mejorar la calidad en la gestión de las empresas e instituciones, en el diseño y fabricación de productos, en la prestación de servicios, etc., aumentando la competitividad en los mercados nacionales e internacionales y son por tanto la herramienta
fundamental para el desarrollo industrial y comercial de un país.
Para la realización técnica de un cálculo, un ensayo, una medida, una especificación,… hay varias formas correctas de hacerlas, unas más farragosas que otras, unas más caras que otras, unas más dependientes del aparato que otras,… lo ideal, y en teoría lo más cómodo, es hacerlo todos igual: como dice la norma, pues se evita tiempo buscando soluciones que tendrían seguramente una referencia tan fundada o incluso podrían ser discutibles, y por supuesto lo ideal es que la norma refleje el procedimiento que utiliza cada cual, o al menos en el país, pero esto es más
difícil, por eso se discuten tanto buscando el consenso.
Constituyen también un mecanismo simplificador de los procesos de obtención de una certificación de calidad y/o de una acreditación, toda vez que recogen procedimientos aceptados para realizar tareas necesarias para garantizar la calidad o para realizar una actividad.
En lo que sigue se presenta una descripción del proceso de normalización español en que se detalla el mecanismo de elaboración de normas y las relaciones internacionales junto con el procedimiento de desarrollo de normas por organismos internacionales.
